30 de mayo de 2011

Koi no Himitsu1 (PiTego)

Introducción:

Desde siempre he admirado a mi hermano, siempre ha sido el quien me cuida; nuestros padres trabajan todo el día, y siempre están ocupados; pero Tomohisa tiene siempre tiempo para mi. Él ha sido mi héroe, es mi ejemplo a seguir. Últimamente su presencia me pone un poco nervioso, pero me gusta y busco cualquier escusa para estar con el a solas…

Capitulo 1.

Un chico normal no tiene fantasías yaoi con otros chicos y menos con su hermano. Pero yo no soy muy normal. No han pasado dos meses de que entre a la universidad y ya me conocen como el matado de la clase. Afortunadamente tengo un guarura propio. Lo conocí en preparatoria, el asesor dijo que necesitaba ayuda con algunas materias, y me pidió a mi Yuya, que ayudara al bravucón de la escuela. Gracias a eso Takahisa-san entro a la universidad, y como agradecimiento me sigue a todos lados y me protege, y a veces le ayudo con algunas tareas todavía. El sabe muchas cosas de mí, como mis fantasías raras, y yo solo se que detesta el yaoi y a los homosexuales. La verdad, nunca me intereso el sexo, al menos no con chicas; a pesar de que varias veces había oído a mis padres tras la puerta.

Como ya dije, desde hacia un tiempo, la presencia de mi hermano me provocaba, mas en verano, con esas diminutas prendas que usaba; por mi par-te disfrutaba el invierno, el frío era gran excusa para abrasarle. Una tarde común como cualquier otra tarde de verano, tratando de ver tele, para no ver las bien formadas (por bailar) piernas de Tomohisa-kun, mamá y papá comenzaron con el conocido ritual del coqueteo, lo que me llamo la atención, siempre corren a su habitación, Tomohisa tomo el control de la tele y puso una película no apta para niños.

-Tomo-chan, cámbiale no quiero ver eso…

-¿de verdad no te gustan las chicas?

--no tiene nada que ver

-¿prefieres a los chicos?- me dijo mientras se tiraba sobre mi con su miembro casi erecto sobre mi estomago.

-¡quítate!, ve a jalártela al baño- lo empuje fuerte hacia atrás y forcejeamos un poco. Así comenzó una lucha por "el control" de la televisión, hasta que accidentalmente uno oprimió el botón de encendido/apagado…

-ves lo que hiciste…

-¿yo? Tú tenías el control

-cállate, ¿escuchas eso?

-si son papá y mamá jugando rudo…

-¿quieres ver?

-eres un pervertido Tomo.

Subimos sigilosamente y nos hincamos detrás de la puerta, suponiendo que estaba cerrada.

-no escucho nada

-acércate mas…-la puerta se abrió un poco, dejando a nuestra vista el bronceado y redondo trasero de papá siendo torturado por un consolador que mamá le introducía mientras él la cogía vigorosamente.

Escuche unos gemidos aun mas cerca…

-¿Qué haces?

-me la pusieron a todo…

-vete al baño

-no quiero perderme nada

-¡que asco!

-¿quieres ayudarme?- sus ojos me provocaban, era la ocasión, conscientemente no quería pero me causaba mucha curiosidad.

-¿vas a ayudarme?

Poniéndome su babeante miembro en la mano me trajo de regreso a la realidad; ¿que debía hacer? ¿Agarrarla o correr?

-claro que no ¿Qué te crees?

-OK, pero o grites

Me levante rápido y fui a mi alcoba, no podía creerlo, como pude dudar de mi. Me tire en la cama para no pensar en ello. Después de eso… no pude ver a mi hermano a la cara, pero quería estar a solas con el…

-¿Qué onda ya terminaste a tarea?

-¿Qué?, así la tarea, ya casi

-¿Qué te traes Yuya? Andas como en babilonia

-no me pasa nada Massu…

-si claro. ¿Otra vez fantaseando con tu hermano?

-¿Cómo se te ocurre?

-ps, por ahí oí que lo vieron en los baños con tu primito, el Prof. nuevo…

-¿Qué? ¿En serio?

-claro que no… ya vez si andas pensando en el.

De acuerdo si estaba pensando en el, o con el. Da lo mismo, Massu ya se había dado cuenta; el sabia que desde el incidente con Tomo no dejaba de pensar en eso. Pero de eso a burlarse frente a todos.

-OK, pero no te pongas celoso, baby.

-¿Qué te pasa?-se levanto como rayo- no hagas esas joterias conmigo

-lo siento mi amor, te compensare en la noche…

-noo… cállate…

Logre que se pusiera completamente rojo de vergüenza, a el esas cosas no le gustan ni de chiste. Aunque lo que dijo de Tomo, me dejo un poco intrigado, mas con la falsa excusa de estar enfermo, para quedarse en casa. Conociéndolo el seria capas de eso… y mas…

Regrese a casa estaba muy cansado; al pasar por la alcoba de Tomohisa, escuche unos gemidos familiares saliendo de su cuarto. Empuje un poco la puerta y lo que no me sorprendió mucho (era de esperarse), pero la situación si; Tomohisa estaba en cuatro con el culo en pompa siendo taladrado por detrás por alguien familiar; mi primo Ryo, no solo lo embestía brutalmente, también masajeaba el miembro erecto y babeante, a punto de estallar de Tomo… Ryo se arrojo sobre de espaldas sobre la cama y Tomo se acomodo sobre el falo erecto y comenzó a cabalgar ferozmente, sobando su pene y arrojo toda su leche sobre el pecho de mi primo, cuando se levanto, la blanca lefa de Ryo corría por sus piernas. Ryo se incorporo tomando entre sus brazos a mi hermano casi exhausto; Ryo murmuro algo al oído de Tomo, y este volteo hacia la puerta. Al parecer Ryo me había visto que los espiaba. Cerré la puerta con un fuerte jalón, y corrí a mi habitación, me tire sobre la cama, estaba empalmado; me quite como pude la ropa y comencé a jalármela pensando en lo que acababa de ver.

Alcance a oír como Tomohisa y Ryo se despedían, y luego este arrancaba el auto para irse. La verdad no me intereso que la puerta de mi habitación estuviera abierta, y Tomo pudiese entrar, de hecho excitaba mas. Escuche unos pasos en el correr, cerré los ojos mientras la puerta se abría; abrí los ojos y vi a Tomo en la puerta observando como un chorro de leche caliente caía sobre mi estomago. Mi hermano camino sonriente hasta mi cama, estaba asustado, mi corazón latió muy rápido, Tomo se sentó junto a mi en la cama; trataría de excusarse por lo que había pasado.

-Yuya, ah! Como has crecido, ya no eres un niño…-su mano tibia recorría mi pecho desnudo – ¿cuando paso que no me di cuenta?

-¡basta, Tomo!- le grite, y coloque mis manos sobre su cabeza para que se levantara, pero el solo lamía mi piel limpiando todo el rastro de semen.

-¿no te gusta?

-no, no es que… mmm… ah!; deten…te…ah!

Tomo disfrutaba con mi confusión, me debatía entre el placer y el asco, mi hermano mayor mi héroe…

-basta an-chan, deten…te… ah!

-mmm… pero esta muy rico… miro como se para otra vez…

-¿de verdad quieres que pare?

-noo…por favor no pares… ahora no

-ya decídete…-Tomo se levanto de la cama, así como si nada…

-¿A dónde crees que vas?, ¿vas a dejarme así?

-¿y yo que gano?

-lo que tu quieras, pero termina…onegai

-¿lo que yo quiera?- el brillo en sus ojos no era de fiar, planeaba algo malo, y yo seria su victima…

-si, lo que quieras

-OK, no te muevas.

Cedí a sus antojos muy fácilmente, pero en ese momento no podía pensar con claridad. Cuando Tomo regreso traía un frasquito de vaselina en las manos. Se sentó sobre mí y comenzó a mamar otra vez, hasta ponerme a pun-to…

-¡voltéate!

-¿Qué?

-¡date vueltas!, sordito-dijo dándome una palmada en las caderas

-ah! ¿Qué?; ¿Qué hace?

-dijiste que harías lo que yo quisiera…

-pero aun…

-sh!- me cerro la boca con un beso… yo perdí el control, Tomo se acomodo entre mis piernas.

-ya que no te darás la vuelta, OK, así lo disfrutaremos los dos…

Se bajo los pantalones hasta las rodillas, tomo el frasco y puso un poco de vaselina en su mano, comenzó a sobar mi trasero, haciendo énfasis en mi ano.

-mmm… no lo hagas…. Por ahí no…

Sh!, te va a gustar…

-¿Por qué lo haces? No está bien

-no esta bien espiar tras la puerta…

-tu espías a nuestros padr…-introdujo uno de sus dedos en mi…

-listo…-se acomodo otra vez mas cerca, sentí su pene en mi a punto de entrar.

-no deberías dilatarlo mas…

-¿y tu que sabes?

-¿me va a doler?- no me dijo nada solo empujo fuerte contra mi cuerpo hasta que sus pelotas chocaron contra mi trasero, un dolor intenso se apodero de mi, Tomo se quedo adentro un rato, se inclino hacia mi.

-¿ya estas listo?-

Dijo suavemente en mi oído, yo mordía la almohada, el busco mis labios, yo quería llorar; intento besarme y yo intente morderlo.

-¿así que no será a la buena?-levanto mis piernas sobre sus hombros y comenzó a bombear rápidamente hasta el fondo…

-¡para! Eso duele…

-quería hacerlo a la buena, pero no eres muy buen amante.

-ah!, detente…

-así me gusta, estas muy rico, bien apretadito…

-ah!...-mi verga comenzó a hincharse; y crecía mas con cada embestida.

-¿vez? Te esta gustando-me sujeto firmemente por las caderas para acercarme mas a el, el dolor comenzaba a ser placentero, y mi verga explotaría en cualquier momento, comencé a masajearla rápidamente…

-ah! Tomo no pares, onegai, no pares…

-si, así jálatela más…

-dame más, mmm…

-el que termine antes se bebe la lefa del otro…OK?

-no estoy para apuestas…ah!

Pasó sus brazos sobre mis muslos; e hizo pasar mis piernas por detrás de su espalda, mientras mordía mis tetillas. Un par de embestida mas y me rendí a sus antojos; una sustancia blanca-viscosa se esparcía entre Tomo y yo… Tomo miro entre nuestros cuerpos maliciosamente…

-yo gane- me beso apasionadamente, y llevo mi piernas hasta arriba, saco su verga y comenzó a jalársela. Me hinque frente de él; para recibir la cálida descarga. Que lleno mi cara de semen…

No hay comentarios: